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Usuario:Rowanwindwhistler/Nasser

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Gamal Abdel Nasser Hussein (árabe : جمال عبد الناصر حسينAlejandría, 15 de enero de 1918-El Cairo, 28 de septiembre de 1970) fue un estadista egipcio. Fue el segundo presidente de la República de Egipto, cargo que desempeó desde 1956 hasta su muerte. Militar de carrera, organizó en 1952 el derrocamiento de la monarquía y se hizo con el poder. Al frente de Egipto, llevó a cabo una política socialista y panárabe que se conoce como nasserismo. Se lo considera uno de los dirigentes los más influyentes del siglo XX.

Nasser participó desde joven en la lucha contra la influencia británica en Egipto. Ingresó en el ejército en 1938 y participó en la guerra israelo-árabe de 1948-1949. Decepcionado por la monarquía y deseoso de reformar la sociedad egipcia, Nasser fundó el movimiento de los oficiales libres, que derrocó al rey Faruq en 1952. Después enfrentarse con sus antiguos socios, entre ellos el presidente Mohammed Naguib, tomó el control del gobierno. Un referéndum en 1956 permitió la adopción de una nueva Constitución, la primera de la era republicana y la proclamación como presidente de Nasser.

La neutralidad de Egipto durante la Guerra fría causó tensiones con las potencias occidentales, que se negaron a financiar la construcción de la presa de Asuán. En represalia, Nasser nacionalizó la compañía del canal de Suez en 1956. El Reino Unido, Francia e Israel organizaron una ofensiva para retomar el control del canal, pero hubieron de replegarse por la presión conjunta de los Estados Unidos y de la Unión soviética. Este hecho incrementó considerablemente el predicamento de Nasser en el mundo árabe; sus discursos en favor de la unión panárabe culminaron con la creación de la República árabe unida con Siria en 1958.

En 1962, Nasser adoptó medidas socialistas y aplicó reformas para modernizar Egipto. A pesar de los contratiempos sufridos por el plan de unión árabe, como la disolución de la unión con Siria y la guerra de Yemen, sus partidarios tomaron el poder en varios países árabes. Fue elegido presidente del movimiento de los países no-alineados en 1964 y, al año siguiente, fue reelegido presidente de Egipto, tras haber impedido que se presentasen otras candidaturas. Después de la derrota de Egipto en la guerra de los Seis Días en 1967, dimitió efímeramente, pero mantuvo finalmente el cargo debido a las manifestaciones que exigían que conservase el poder. Después del conflicto, Nasser asumió el puesto de primer ministro, lanzó ataques para retomar los territorios perdidos, despolitizó el ejército y prometió que realizaría una liberalización política. Al terminar la cumbre de la Liga árabe en 1970, Nasser falleció de un ataque cardiaco. Cinco millones de personas acudieron a su funeral en  El Cairo y se extendió el duelo por su pérdida en el mundo árabe. A principios del siglo XXI, aún se considera a Nasser símbolo de la la lucha por la dignidad árabe, gracias a sus esfuerzos para implantar una mayor justicia social y su defensa del panarabismo, de la modernización de Egipto y del antiimperialismo. Por su parte, sus detractores han criticado su autoritarismo, su populismo, las violaciones de los derechos humanos durante su gobierno y su fracaso en crear instituciones civiles duraderas. Los historiadores consideran a Nasser una figura central de la historia moderna del Oriente Próximo y del siglo XX.

Juventud

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Photographie d'un garçon portant une veste, une chemise blanche avec une cravate noire et un fez
Nasser en 1931.

Gamal Abdel Nasser nació el 15 de enero de 1918 en Bakos en los suburbios de Alejandría; fue el promogénito de Fahima y de Abdel Nasser Hussein.{sfn|Vatikiotis|1978|p=23-24}} Su padre era un empleado de los correos[1]​ y había nacido en Beni Mur, en el Alto Egipto, pero se había criado en Alejandría[2]​ mientras que la familia materna provenía de Mallawi en la actual provincia de Minya.[3]​ Sus padres se habían casado en 1917[3]​ y tuvieron otros hijos: Izz al-Arab y al-Leithi.[2]​ La familia de Nasser se mudaba frecuentemente debido a los cambios de destino del padre; se instaló en Catégorie:Article contenant un appel à traduction en anglais Assiut en 1921, después a Khatatba, donde el padre de Nasser fue el director de una oficina de correos. Nasser acudió a la escuela de los hijos de ferroviarios hasta en 1924, cuando se lo envió a vivir con su tío paterno a El Cairo.[4]

Nasser mantuvo contacto epistolar con su madre, a la que visitaba durante las vacaciones, pero cesó de recibir cartas a finales de abril 1926. A su regreso a Jatatba, se enteró del fallecimiento de su madre, muerta del parto de su tercer hermano, Shawki;  la familia le había ocultado la noticia.[5]·[6]​ Nasser declaró más tarde que:[7]

perder su madre fue un traumatismo profundo que el tiempo no ha aliviado

[7]​ ». Adoraba a su madre y quedó muy afectado por el nuevo matrimonio de  su padre, que se celebró antes del final del año.[5]·[8]·[9]

En 1928, Nasser se instaló en Alejandría, con su abuelo materno.[6]·[7][7]​ Estudió un tiempo en un internado en Helwan antes de volver a Alejandría en 1933, cuando transfirieron a su padre a los servicios postales de la ciudad.[6]·[7][7]​ Nasser participó muy pronto en la actividad política.[6]·[10]​ Al presenciar enfrentamientos entre los manifestantes y la policía en la plaza Manshia de Alejandría,[7]​ se unió a la manifestación, aunque ignoraba sus reivindicaciones.[11][7]​ La protesta, organizada por el partido nacionalista Joven Egipto, exigía el final de la influencia extranjera en el país tras la abrogación de la Constitución de 1923 por el primer ministro Ismaïl Sidqi.[7][7]​ Nasser fue arrestado y pasó la noche detenido[12]​ hasta que su padre lo puso en libertad.[6]

Scan d'un document écrit en arabe
Número de noviembre de 1935 del periódico Al-Gihad, en el cual el se ha marcado el nombre de Nasser en rojo.

Cuando destinaron a su padre a El Cairo en 1933, Nasser lo siguió y estudió en  al-Nahda al-Masriaref name="BibliothecaHoda"/>·[13]​ Escribió artículos en el periódico de la escuela y participó en obras de teatro escolar, entre ellas una sobre el filósofo francés Voltaire titulada Voltaire, el hombre de la Libertad.[7]·[13]​ El 13 de noviembre de 1935, dirigió una manifestación estudiantil contra la influencia británica, consecuencia de las declaraciones del secretario de Estado británico Samuel Hoare en las que había  rechazado restauración de la Constitución de 1923.[7]​ Dos manifestantes murieron y Nasser fue herido levemente en la frente por una bala.[12]​ Gracias a este hecho apareció por primera vez en la prensa; el periódico nacionalista Al Gihad informó que Nasser había sido uno de los dirigentes de la manifestación y que había sido herido.[7]·[14]​ El 12 de diciembre, el nuevo rey Faruq firmó un decreto que restauraba la Constitución.[7]​ Debido a su intensa actividad política, Nasser no asistió más que cuarenta y cinco días a las clases durante su último año de colegio.[15]·[16]​ Se opuso al Tratado anglo-egipcio de 1936 que prolongaba el mantenimiento de parte de las bases británicas en el país.[7]​ La cuasi totalidad de las fuerzas políticas egipcias, por el contrario, lo parobaron y la agitación disminuyó considerablemente. Nasser retomó sus estudios en al-Nahda al-Masria[15]​ y abandonó la escuela con el equivalente al diploma.[7]

Según el historiador Saïd K. Aburich, a Nasser no le afectaron los frecuentes traslados, que ampliaron su visión y le concienciaron sobre las divisiones de la sociedad egipcia. Consagraba mucho tiempo a la lectura, en particular en 1933 porque cerca de la biblioteca nacional. Había leído el Corán, los hadîths de Mahoma, los sahabas de sus compañeros[17]​ y las biografías de caudillos nacionalistas como Napoleón, Atatürk, Bismarck, Garibaldi, así como la  autobiografía de Winston[7]​ Churchill.[7]·[12]·[18]·[19]​ Le influyó especialmente el nacionalismo egipcio del político Mustafa Kamil, del poeta Ahmed Chawqi[17]​ y de su instructor en la academia militar, Aziz Ali al-Misri, al cual Nasser expresó su gratitud en una entrevista en 1961.[20]​ Indicó además que la novela La conciencia recuperada en el cual Tawfiq al-Hakim había escrito que el pueblo egipcio no necesitaba más que « de un hombre que representaría todos sus deseos y sentimientos y que sería su símbolo » le había servido de inspiración durante la revolución de 1952.[18]

Carrera militar

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La neutralidad de Egipto durante la Guerra Fría causó tensiones con las potencias occidentales, que se negaron a financiar la construcción de la presa de Asuán. En represalia, Nasser nacionalizó la compañía del canal de Suez en 1956. El Reino Unido, Francia e Israel organizaron una ofensiva para retomar el control del canal, pero hubieron de replegarse por la presión conjunta de los Estados Unidos y la Unión soviética. Este hecho incrementó considerablemente el predicamento de Nasser en el mundo árabe; sus discursos en favor de la unión árabe culminaron con la creación de la República árabe unida en la que ingresaron Egipto y Siria en 1958.

Photographie d'un homme portant un costume avec une cravate. Ses cheveux noirs sont coiffés en arrière et il porte une fine moustache.
Nasser en 1937.

En 1937, Nasser solicitó el ingreso en la Academia militar egipcia, reservada hasta entonces a los jóvenes de la aristocracia y de la alta burguesía; el acuerdo concluido en 1936 con los ocupantes británicos permitió al Ejército egipcio ampliar el reclutamiento a la pequeña burguesía, hecho del que se benefició Nasser para hacerse oficial,[21][22]​ aunque su pasado de opositor al gobierno bloqueó su admisión[23]​. Decepcionado, regresó a la facultad de Derecho de la Universidad Fuad,[23]​ pero la abandonó al cabo de un semestre para intentar nuevamente ingresar en la academia militar.[24]​ Consciente que no sería admitido sin recomendación, Nasser obtuvo una entrevista con el subsecretario de Guerra, Ibrahim Jairy Bajá,[21]​ responsable de las admisiones.[23]​ Aceptó respaldar la solicitud de Nasser, que fue aceptada a finales de 1937.[21][23][25]​ Nasser consagró entonces todo su tiempo a la carrera militar y mantuvo escaso contacto con la familia. En la academia, conoció a Abdel Hakim Amer y Anwar el-Sadat, que más tarde fueron estrechos colaboradores durante el periodo en el que ejerció la presidencia del país.[26]​ Después de haberse graduado en julio de 1938,[7]​ se lo destinó a Manqabad, cerca de la ciudad de Beni Mur como alférez de infantería.[27]​ En 1941, se trasladó a Nasser y Amer a Jartum, en el Sudán anglo-egipcio.[28]​ En mayo de 1943, obtuvo una plaza de instructor en la academia militar.[28]

En la noche del 4 al 5 de febrero de 1942, el embajador británico Miles Lampson hizo acordonar el palacio del rey Faruq para exigir la destitución del primer ministro Hussein Sirri Pacha debido a sus simpatías por el Eje, en un momento en el que las fuerzas de este habían penetrado en territorio egipcio. Nasser interpretó este suceso como una infracción flagrante de la soberanía egipcia y escribió «siento vergüenza de ver que nuestro ejército no ha reaccionado ante este ataque».[29]​ Vuelto a la escuela de oficiales ese mismo año,[29]​ comenzó a formar un grupo de jóvenes oficiales que abogaban por llevar a cabo una revolución nacionalista.[30]​ Nasser mantenía el contacto con los miembros del grupo por medio de Amer, que continuaba reclutando oficiales afines en el seno de las diferentes armas de las Fuerzas Armadas egipcias y le enviaba un informe detallado sobre cada uno estos.[31]

Photographie de trois hommes en uniforme militaire. L'homme au centre tient un drapeau tandis que ses voisins portent un fusil.
Nasser, abanderado de su unidad, en 1940.

El bautizo de fuego de Nasser tuvo lugar en Palestina durante la guerra árabe-israelí de 1948.[32]​ Se había presentado voluntario al Alto Comité árabe presidido por Amin al-Husayni. Este último quedó impresionado por Nasser,[33]​ pero el Gobierno egipcio rechazó su ingreso en las fuerzas árabes por razones desconocidas.[33][34]​ En mayo de 1948, tras la retirada británica, el rey Faruq desplegó el ejército egipcio en Palestina;[35]​ Nasser se hallaba al frente del 6.º Batallón de Infantería.[36]​ Durante el conflicto, informó de la falta de adiestramiento del ejército egipcio, cuyos soldados «se estrellaban contra las fortificaciones».[35]​ El 12 de julio, fue herido leve mientras sus fuerzas estaban rodeadas por el ejército israelí en la bolsa de Faluya. La Legión Árabe jordana soslayó sus peticiones de auxilio, pero aun así su unidad se negó a rendirse. Las negociaciones entre Israel y Egipto condujeron finalmente a la cesión de Faluya al Estado hebreo.[35]​ Según el periodista Eric Margolis, el aguante de las tropas egipcias en Faluya fue «una de dos únicas acciones árabes honorables durante la guerra israélo-árabe de 1948-1949». Sus defensores, entre ellos el joven oficial Gamal Abdel Nasser, se volvieron héroes.[37]

La cantante egipcia Umm Kalzum organizó festejos para celebrar la vuelta de los oficiales, a pesar de las reservas del Gobierno, que había recibido presiones británicas para anular la recepción. El distanciamiento palmario de la población y de la monarquía en los actos para celebrar el regreso de los oficiales reforzó la determinación de Nasser a acabar con esta.[38]​ Sentía además que su unidad había sido abandonada durante los combates, pese a la enconada resistencia que había ofrecido al enemigo.[39]​ Había comenzó la redacción de su libro Filosofía de la revolución durante el cerco de la unidad.[37]​ Después de la guerra, recuperó su plaza de instructor en la academia militar.[40]​ Contactó con los Hermanos Musulmanes en octubre de 1948 para intentar formar una alianza con ellos, pero consideró que el programa de estos era incompatible con su nacionalismo y comenzó a oponerse a su influencia.[35]​ Nasser formó parte de la delegación egipcia que negoció los acuerdos de armisticio con Israel en Rodas; juzgó los términos humillantes, en particular a causa de la operación Uvdá, gracias a la cual los israelíes se apoderaron fácilmente de la región de Eilat.[41]

Toma de poder

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Movimiento de los oficiales libres

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Los oficiales libres después del golpe de Estado de 1953. De izquierda a derecha : Jaled Mohieddin, Abdel Latif Boghdadi, Kamal el-Din Hussein (de pie), Gamal Abdel Nasser (sentado), Abdel Hakim Amer, Muhammad Naguib, Yussef Seddik y Ahmad Shawki.

El regreso de Nasser a Egipto coincidió con el golpe de Estado de Husni al-Za'im en Siria.[42]​ Su éxito y el gran apoyo popular que recibió atizaron las ambiciones revolucionarias de Nasser.[42]​ Poco después de su vuelta, Nasser fue convocado por el primer ministro Ibrahim Abdel Hadi, que lo interrogó sobre los rumores que corrían acerca de que formaba un grupo secreto de oficiales sediciosos.[42]​ Según fuentes indirectas, parece ser que Nasser negó la acusación de manera convincente.[42]​ Abdel Hadi vacilaba en tomar medidas demasiado drásticas contra el Ejército.[42]​ La entrevista convenció a Nasser de la necesidad de acelerar la formación de su grupo,[42]​ que tomó el nombre de Movimiento de Oficiales Libres en 1949.[40]​ Nasser formó el comité fundador del movimiento, compuesto por catorce hombres de diferentes ambientes sociales y políticos: había miembros del grupo Joven Egipto, de la organización de los Hermanos Musulmanes, del partido comunista egipcio y de la aristocracia.[42]​ Nasser fue elegido presidente de la organización por unanimidad.[42]

Durante las elecciones legislativas de 1950, el partido Wafd logró una amplia victoria, fundamentalmente a causa de la ausencia de los Hermanos Musulmanes, que habían decidido no participar en ellas; el movimiento de los oficiales libres los consideraba una amenaza, porque sus exigencias eran similares a las suyas.[43]​ Sin embargo, cuando miembros del partido Wafd fueron acusados de corrupción, la tensión política hizo que el movimiento de Nasser ganase relevancia.[44]​ La organización contaba entonces aproximadamente con noventa miembros; según uno de ellos, Jaled Mohieddin, «nadie que no fuese Nasser conocía su identidad o su lugar en la jerarquía».[44]​ Este creía que su movimiento no estaba listo todavía para enfrentarse al Gobierno y durante dos años se limitó a reclutar oficiales y a la publicación de periódicos clandestinos[45]​.

El 11 de octubre de 1951, el Gobierno, dominado por el partido Wafd, abrogó el tratado anglo-egipcio de 1936, que había concedido el control del canal de Suez al Reino Unido hasta 1956.[45]​ Esta decisión fue bien vista por la población y las acciones clandestinas contra los británicos, que contaron con la colaboración gubernamental, impelieron a Nasser a actuar.[45]​ Según Sadat, Nasser decidió desatar «una ola de asesinatos a gran escalera».[46]​ En enero de 1952, el propio Nasser y varios oficiales más intentaron asesinar al general monárquico Hussein Sirri Amer ametrallando su coche mientras que circulaba por las calles de El Cairo.[46]​ El general salió indemne del atentado, pero un transeúnte resulto herido.[46]​ Nasser recordó luego que este hecho «lo obsesionaba» y lo disuadió completamente de repetir este tipo de ataques.[46]

Sirri Amer era cercano al rey Faruq y fue designado por la presidencia para solicitar la jefatura de la asociación de oficiales, un puesto esencialmente ceremonial.[46]​ Nasser estaba resuelto a separar al Ejército de la monarquía. Con la ayuda de Amer, escogió como candidato al puesto a Muhammad Naguib, un general popular que había presentado su dimisión en 1942 a causa de las presiones británicas y había sido herido tres veces en la guerra contra Israel.[47]​ Naguib logró una clara victoria en las votaciones y el movimiento, en  al-Misri, uno de los principales periódicos egipcios, informó de este éxito al tiempo que alababa el espíritu nacionalista del ejército.[47]

Revolución de 1952

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Los señores de Egipto tras el derrocamiento del rey Faruq en noviembre; de izquierda a derecha: Sulayman Hafez, Mohammed Naguib y Nasser.

El 25 de enero de 1952, durante unos enfrentamientos en Ismailía, las fuerzas británicas estacionadas a lo largo del canal de Suez mataron a cuarenta policías egipcios. Al día siguiente, los disturbios de El Cairo causaron la muerte de setenta y seis personas, nueve de ellas británicas. Poco después, Nasser presentó un programa de seis puntos que pretendía desmantelar el feudalismo y acabar con la influencia británica. En mayo de 1952, se enteró de que Faruq conocía los nombres de los oficiales que pertenecían a su movimiento y que se aprestaba a arrestarlos; encargó entonces a Zakaria Mohieddin que preparase el derrocamiento del rey con tropas leales al movimiento.[48]

El Movimiento de Oficiales Libres no tenía la intención de tomar el poder, sino de establecer una democracia parlamentaria. Nasser consideraba que el pueblo no aceptaría las acciones de un mero teniente coronel y eligió al general Naguib para dirigir el golpe de Estado en su nombre. El alzamiento se realizó el 22 de julio y los «oficiales libres» tomaron rápidamente el control de los edificios oficiales, de las comisarías, de los centros de los Estados Mayores y de las emisoras de radio de la capital. Nasser, vestido de civil para evitar que lo identificasen las fuerzas monárquicas, pasó por los diferentes puntos controlados por los rebeldes para evaluar la situación.[49]​ Con el fin de evitar una intervención extranjera, Nasser había informado a los Gobiernos británico y estadounidense de sus intenciones dos días antes y ambos habían aceptado no sostener a Faruq.[49][50]​.A cambio, Nasser había accedido a permitir que el rey abandonase Egipto durante una ceremonia oficial.[51]

Naguib, que era en público el director del Gobierno revolucionario, juró como primer presidente de Egipto el 18 de junio de 1953. El mismo día se abolió la monarquía y se proclamó la república.[49]​ Según Aburish, después de hacerse con el poder, Nasser y los «oficiales libres» querían ser «los defensores de los intereses del pueblo» contra la monarquía y los bajás y dejar la gestión del país en manos de los civiles.[52]​ Pidieron al antiguo primer ministro Ali Mahir Bajá que volviese a este cargo y formase un Gobierno civil.[52]​ Los «oficiales libres» gobernaban indirectamente por medio del Consejo Revolucionario Egipcio (RCC), del que Naguib era presidente y Nasser, vicepresidente.[53]​ Las relaciones con Mahir empeoraron rápidamente, debido a que este opinaba que las ideas de Nasser como la reforma agraria, la abolición de la monarquía y la reorganización de los partidos políticos eran demasiado radicales.[54]​ Por ello Mahir dimitió el 7 de septiembre y su puesto lo ocupó Naguib, mientras que Nasser devino vice primer ministro.[55][56]​ La reforma agraria comenzó en septiembre;[54]​ para Nasser, esta permitiría legitimar el poder del RCC y transformar el golpe de Estado en revolución.[57]

En agosto de 1952, estallaron disturbios atizados por los comunistas en fábricas textiles de Kafr el-Dawwar; en los choques con las tropas hubo nueve muertos. Una mayoría de las miembros del RCC, entre ellos Naguib, quería ajusticiar a los dos cabecillas de la insurrección para dar ejemplo, a lo que Nasser se opuso firmemente. A pesar de ello, se llevaron a cabo las condenas a muerte. Los Hermanos Musulmanes habían apoyado al RCC durante la toma del poder y exigieron cuatro ministerios en el nuevo Gobierno. Nasser lo rechazó, pero intentó atraerse al movimiento concediéndole dos puestos menores; los dos miembros del movimiento los aceptaron, pero como independientes, no como representantes de la formación.[57]

Presidente

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Oposición a Naguib

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Nasser (derecha) y Muhammad Naguib durante celebraciones del segundo aniversario de la Revolución de 1952.

En enero de 1953, Nasser prohibió todos los partidos políticos[58]​ y creó un partido único con el nombre de Concentración de la Liberación, del que asumió la secretaría general, para unir a los grupos que respaldaban al RCC.[59]​ A pesar de esta decisión, Nasser era, según Abdel Latif Boghdadi, el único miembro del RCC que deseaba organizar elecciones legislativas.[58]​ En marzo de 1953, presidió la delegación egipcia que negoció la retirada británica del canal de Suez.[60]

Cuando Naguib comenzó a mostrar su independencia respecto de Nasser distanciándose de la reforma agraria y acercándose al partido Wafd y a los Hermanos Musulmanes,[61]​, Nasser decidió derrocarlo.[60]​ En junio, destituyó al ministro del Interior Sulayman Hafez, partidario de Naguib,[61]​ y acució a este último para que proclamase la abolición de la monarquía.[60]​ El 24 de febrero de 1954, Naguib anunció su dimisión como consecuencia de una reunión del RCC que se había celebrado dos días antes.[62]​ El 26 de febrero, Nasser la aceptó y lo puso en arresto domiciliario,[62]​ mientras que el RCC lo nombró a él presidente del comité y primer ministro.[63]​ Naguib, sin embargo, se había preparado para esta eventualidad e hizo que una unidad de caballería se amotinase, exigiese que se le devolviese su cargo de presidente y se disolviese el RCC.[62]​ Nasser, que se encontraba en el Estado Mayor exigiendo el fin del motín, tuvo al principio que transigir con los rebeldes.[64]​ Sin embargo, el 27 de febrero, partidarios de Nasser en el Ejército atacaron el cuartel general del Ejército y pusieron fin a la rebelión.[65]​ Ese mismo día, centenares de miles de manifestantes, pertenecientes sobre todo a los Hermanos Musulmanes, exigieron el regreso de Naguib y el arresto de Nasser.[66]​ En respuesta, una parte importante del RCC, encabezada por Jaled Mohieddin, obligó a Nasser a acceder a parte de las reivindicaciones.[60]​ El regreso de Naguib, empero, se retrasó hasta el 4 de marzo, lo que permitió a Nasser nombrar a Amer jefe de las Fuerzas Armadas, función que hasta entonces había desempeñado también Naguib.[67]

El 5 de marzo, las fuerzas de seguridad de Nasser arrestaron a millares de participantes en el alzamiento de 1952.[66]​ Con el fin de recuperar la unidad de la oposición tal como existía antes de la toma del poder, el RCC decretó el final de las restricciones sobre los partidos implantada durante del periodo monárquico y la retirada de los «oficiales libres» de la política.[66]​ Los que se habían beneficiado de la revolución impulsada por estos (obreros, campesinos y los artesanos) se opusieron a este decreto;[68]​ un millón de trabajadores se pusieron en huelga y millares de campesinos marcharon a El Cairo para protestar a finales del mes de marzo.[69]​ Naguib sopesó la posibilidad de reprimir las manifestaciones, pero las fuerzas de seguridad se negaron a hacerlo.[70]​ El 29 de marzo, Nasser anunció la anulación de los decretos en respuesta a las exigencias de la calle.[70]​ Entre abril y junio, se arrestó o destituyó a centenares de partidarios de Naguib en el Ejército y Mohieddin tuvo que partir al exilio en Suiza.[70]

Presidencia del RCC

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El 26 de octubre de 1954, Mohammed Abdel Latif, un miembro de los Hermanos Musulmanes, intentó asesinar a Nasser mientras que daba un discurso en Alejandría para celebrar la retirada de las fuerzas británicas. El discurso estaba siendo emitido por radio a todo el mundo árabe. El atacante se encontraba a siete metros y medio de la tribuna y disparó ocho tiros, que no alcanzaron a Nasser. El pánico cundió entre la multitud, pero Nasser continuó hablando, aunque con la voz tomada por la emoción[71][72] :

La tentativa de asesinato se volvió los que la habían ordenado y a su regreso a El Cairo, Nasser ordenó el arresto de millares de opositores, esencialmente miembros de los Hermanos Musulmanes, pero también comunistas y partidarios de Naguib[73]. Ocho jefes de la cofradía fueron ejecutados[73] aunque la condena a muerte de su principal ideólogo, Saïd Qotb, fue conmutada  por quince años de prisión[74]. Naguib fue destituido de su cargo de presidente y puesto en arresto domiciliario; no fue nunca juzgado ni condenado, pero nadie del Ejército no hizo nada para defenderlo. Tras la eliminación de sus rivales, Nasser se hizo el dueño de Egipto[72].

Photographie d'un homme debout dans un véhicule sans toit faisant signe à la foule entourant la voiture.
Nasser, ovacionado por la multitud en Alejandría, un día después de anunciar la retirada británica y de sufrir un fallido atentado, el 27 de octubre 1954.

El apoyo de la calle era todavía demasiado débil para que Nasser pudiese aplicar sus reformas y tuvo que afianzarse en el poder[75]. Para reforzar la Concentración de la Liberación, dio discursos en todo el país[75] y sometió a la prensa, ordenando que toda publicación pasase la censura del partido, para evitar la «sedición[76]». Um Kalzum y Abdel Halim Hafez, los principales cantantes árabes del momento, escribieron canciones que alababan el nacionalismo de Nasser, mientras que otros artistas denigraban a sus opositores políticos[75]. Según sus colaboradores, fue el propio Nasser quien organizó la campaña propagandística[75]. Términos que hacen referencia al nacionalismo árabe como la «patria árabe» o la «nación árabe» comenzaron a aparecer frecuentemente en sus discursos en 1954-1955, mientras que anteriormente empleaba los de «pueblos» árabes y «región árabe[77]». En enero de 1955, el RCC lo designó presidente interino hasta que se celebrasen las elecciones legislativas[75].

Nasser mantuvo contactos secretos con Israel en 1954-1955 pero juzgó una paz imposible con un país que consideraba como «un Estado expansionista que desdeña a los árabes[71]». El 28 de febrero de 1955, las tropas israelíes atacaron la franja de Gaza, controlada por Egipto, para poner final a los ataques de los fedayines palestinos. Nasser estimaba que el ejército egipcio no estaba listo para sostener un conflicto con Israel, pero la incapacidad para responder a las acciones israelíes dañó su popularidad[79],[80]. Ordenó entonces el refuerzo del bloqueo del estrecho de Tiran y en septiembre limitó el tráfico aéreo israelí en el golfo de Aqaba[79]. En respuesta, los Israelíes se desplegaron en la zona désmilitarizada de al-Auja, en la frontera egipcia el 21 de septiembre[80].

Simultáneamente con la incrusión israelí de febrero, varios aliados regionales del Reino Unido como Iraq firmaron el pacto de Bagdad. Nasser vio en esta alianza militar una amenaza para los esfuerzos egipcios que pretendían minar la influencia británica en Oriente Próximo y un medio para debilitar la Liga árabe, «perpetuando el sometimiento [árabe] al sionismo y al imperialismo [occidental][72]». Creía que, para mantener la posición dominante de Egipto en la región, tenía que adquirir armamento moderno. Cuando quedó claro que los países occidentales no proporcionarían equipamiento militar en términos aceptables[79],[80],[81], Nasser acudió al Bloque del Este y firmó un contrato de armamento de trescientos veinte millones de dólares (aproximadamente dos millardos doscientos millones de dólares de 2012) con Checoslovaquia el 27 de septiembre[79],[80].[73]​ Gracias a este acuerdo, se recuperó parcialmente el equilibrio de fuerzas entre Egipto e Israel y se reforzó el papel de Nasser como dirigente árabe que desafiaba Occidente[80].

Conferencia de Bandung

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Photographie de six hommes assis sur un tapis.
Nasser y Ahmad bin Yahya de Yemen de Norte miran al objetivo durante la conferencia de Bandung de abril de 1955. El príncipe Faysal de Arabia saudita aparece al fondo con un agal y Mohammed Amin al-Husseini se encuentra en primer plano.

En la conferencia de Bandung, celebrada en Indonesia a finales del mes de abril de 1955, Nasser fue el principal representante de los países árabes y uno de los participantes que gozaba de mayor simpatía popular[83],[84]. De camino a la conferencia, hizo escala en Afganistán,  Pakistán[85], India[86] y Birmania[87]. Nasser actuó como mediador entre las fracciones prooccidental, proasoviética e independiente para facilitar la redacción del comunicado final[83] sobre el colonialismo en África y en Asia y la creación de un tercer bloque neutral en la Guerra fría. Defen Catégorie:Article contenant un appel à traduction en anglais dió la independencia de las colonias francesas del África septentrional, el derecho al regreso de los refugiados palestinos a su territorio y la adopción de resoluciones de la Organización de Naciones Unidas para poner final al conflicto israelo-árabe[88]. Después de la conferencia, Nasser asumió oficialmente la «neutralidad positiva» del presidente yugoslavo Josip Broz Tito y del presidente indio Jawaharlal Nehru e hizo de él el elemento central de la política exterior egipcia durante la Guerra fría[84],[89]. Fue recibido a su regreso por un gran multitud en las calles de El Cairo el 2 de mayo y felicitado por la prensa por sus logros en la conferencia. La confianza en Nasser y su prestigio aumentaron considerablemente[90].

Constitución de 1956

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Con su posición interior muy reforzada, Nasser fue capaz de imponerse a sus colegas del RCC y gozó de una autonomía política indiscutible,[87] en particular en lo concerniente a la política exterior.[91] En enero de 1956, se aprobó una nueva Constitución que instauró un sistema de partido único, llamado Unión Nacional (NU)[91] ; Nasser describió esta organización como «el marco en el cual realizaremos nuestra revolución[74]». La NU era un remozamiento de la Concentración por la Libertad,[93] en la que Nasser estimaba que no se había logrado que la población participase suficientemente.[94] En el nuevo movimiento, Nasser intentó de reforzar los comités locales para acrecentar el apoyo popular a su régimen[94].

El nombramiento de Nasser a la presidencia y la nueva Constitución se sometieron a un referéndum el 23 de junio de 1956, en el que recibieron más del 99,8 % de los votos[91]. Se creó una asamblea nacional con trescientos cincuenta miembros y se convocaron elecciones para julio de 1957[93]. Las autoridades rechazaron a numerosos candidatos y los poderes de la asamblea estaban limitados por el poder de veto del presidente[95]. La Constitución concedía el derecho de voto a las mujeres, prohibía toda discriminación sexual y concedía amparo a las mujeres en el mundo del trabajo[96]. El RCC aprobó disolverse y sus miembros retomaron sus puestos militares como parte del proceso de traspaso del poder a los civiles[97]. Durando las deliberaciones que tuvieron lugar para formar un nuevo Gobierno, Nasser acometió una purga de sus antiguos socios del movimiento de los oficiales libres[91].

Crisis del canal de Suez

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Nacionalización

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Photographie d'un homme en uniforme militaire hissant un drapeau au sommet d'un mat. Plusieurs personnes en uniforme se tiennent derrière lui.
Nasser iza la bandera egipcia en la ciudad de Puerto Saïd para celebrar la marcha de los últimos soldados británicos de la zona del canal en junio de 1956.

Después de tomar oficialmente el poder, la política interior y exterior de Nasser comenzó a amenazar los intereses del Reino Unido y de Francia. Esta última criticó su apoyo a los independentistas argelinos, mientras que el Gobierno británico de Anthony Eden tuvo que soportar la campaña de Nasser contra el pacto de Bagdad[97]. Los Estados Unidos estaban disgustados por la neutralidad egipcia en la Guerra fría, el reconocimiento de la China comunista por Nasser y sus compras de armas al Bloque del Este. El 19 de julio de 1956, los Estados Unidos y Reino Unido retiraron repentinamente sus ofertas de financiación de la presa de Asuán[97]. Nasser se enteró de la retirada anglo-americana del proyecto por un comunicado de prensa, mientras que volvía a Egipto de un viaje a Belgrado y quedó indignado[98]. Aunque la idea de nacionalizar el canal de Suez se vislumbraba después de la retirada de las fuerzas británicas -el último soldado abandonó Egipto el 13 de junio de 1956-, el periodista Mohamed Hassanein Heikal afirma que Nasser tomó esta decisión entre el 19 y el 20 de julio[98]. Nasser indicó más tarde que había tomado la decisión el 23 de julio, después de haber mantenido varias reuniones con sus consejeros[98]. La mayoría de las miembros del Gobierno no fueron informados de los preparativos y no conocieron la decisión hasta algunas horas antes de que Nasser la proclamase[98].

El 26 de julio de 1956, Nasser dio un discurso en Alejandría durante el cual anunció la nacionalización de la compañía del canal de Suez con el fin de financiar la construcción de la presa de Asuán tras la retirada anglo-estadounidense del proyecto[99]. En el discurso, denunció el imperialismo británico en Egipto y su control de los beneficios obtenidos de la explotación del canal. Declaró que el pueblo egipcio tenía el derecho de ejercer su soberanía sobre el canal ya que millares de egipcios habían muerto construyéndolo[99]. La decisión era técnicamente una infracción del acuerdo firmado con el Reino Unido el 19 de octubre de 1954,[100] incluso si, como afirmó, se compensaría a los accionistas.[75]

El anuncio de la nacionalización fue acogida con entusiasmo por la audiencia y las manifestaciones de apoyo se extendieron por todo el mundo árabe[102]. El embajador estadounidense Henry TIENE. Byroade indicó: « Yo no puede que insistir sobre la popularidad de la nacionalización de la compañía del canal en Egipto incluso cerca de los adversarios de Nasser[76] ». El politólogo egipcio Mahmoud Hamad escribió que antes 1956, Nasser había consolidado su poder sobre la burocracia militar y civil de Egipto, pero que fue la nacionalización del canal la que le granjeó una legitimidad popular casi total y el momento en el que devino el «jefe carismático» y el « portavoz de las masas no sólo en Egipto pero en todo el Tercio-Mundo[77] ». Según Aburish, este momento fue el de mayor triunfo de Nasser en la causa del panarabismo y « su effigie se encontró rápidamente en los intentas de Yemen, los souks de Marrakech y las elegantes villas de Siria[78] ». El día de la nacionalización, Egipto cerró el canal al tráfico marítimo israelí.[75]

Intervención occidental

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Noticiario en  inglés sobre la nacionalización del canal de Suez y las reacciones en Egipto y en el extranjero.

Francia y Reino Unido, que eran los principales accionistas de la compañía del canal de Suez, vieron su nacionalización como una nueva medida hostil del Gobierno egipcio. Nasser era consciente que su decisión podría desencadenar una crisis internacional y estimaba que había un 80 % de posibilidades de que los países interviniesen[104]. Suponía, sin embargo, que el Reino Unido necesitaría al menos dos meses para prepararse parauna intervención militar y que una acción israelí era «imposible[105]». Al principio del mes de octubre, el consejo de seguridad de las Naciones Unidas se reunió para tratar la cuestión de la nacionalización y adoptó una resolución que reconocía el derecho de Egipto a controlar el canal mientras se autorizase el cruce de barcos extranjeros[106]. Según Heikal, Nasser creyó que después de este acuerdo la probabilidad de un ataque se había reducido al 10 %[107]. Francia, Reino Unido e Israel firmaron sin embargo un acuerdo secreto con el objetivo de retomar el control del canal, ocupar ciertos territorios egipcios[100], y derrocar a Nasser[109],[110],[111].[79]

El 29 de octubre, las fuerzas israelíes entraron en el Sinaí, desbarataron las defensas egipcias y avanzaron rápidamente por la península. Dos días más tarde, las aviaciones británica y francesa bombardearon los aeródromos egipcios en la zona del canal[112]. Nasser ordenó a su Estado Mayor replegarse del Sinaí para reforzar las defensas del canal[113]. Temía que si las unidades blindadas se desplegaban para rechazar la invasión israelí y los franceses y británicos desembarcaban en la ciudad portuaria de Puerto Saíd, los tanques egipcios en el Sinaí quedarían aislados y serían destruidos[113]. Amer disentía y quería que los carros egipcios atacasen a los israelíes[113]. El 3 de noviembre tuvo lugar una tensa reunión entre los dos, en la que Amer acabó cediendo y aceptando la opinión de Nasser[113]. Este ordenó igualmente bloquear el canal hundiendo o inmovilizando cuarenta y nueve barcos en sus extremos[114]. A pesar de la retirada de las tropas egipcias, aproximadamente dos mil soldados murieron en los combates con Israel y durante el repliegue[115] y otros cinco mil fueron capturados por los israelíes[113]. Amer y Salah Salem propusieron solicitar un alto el fuego y Salem sugirió que Nasser se entregase a las fuerzas británicas[100]. Nasser reprendió  a los dos y prometió que nadie se rendiría[114]. Tomó el control del ejército y, para compensar el pobre desempeño de los militares, autorizó la distribución de cuatrocientos mil fusiles a voluntarios; se formaron unidades de milicia  por todo Egipto[116].

Nasser consideraba que Puerto Saíd debía ser el centro estratégico y psicológico de la defensa egipcia[117]. Se desplegaron nuevas unidades de la guardia nacional como refuerzo y se encargó a varios regimientos organizar la resistencia popular[118]. Nasser y Boghdadi se trasladaron a la zona del canal para sostener el ánimo de los voluntarios. Según las memorias de Boghdadi, Nasser describió al Ejército egipcio como «quebrado» cuando vio el armamento destruido en los combates[118]. Cuando las fuerzas británicas y francesas desembarcaron en Puerto Saíd el 5 de noviembre, la milicia local opuso una fuerte resistente[116][119]. El comandante de la ciudad deseaba solicitar las condiciones de un alto el fuego, pero Nasser lo rechazó. Los británicos y franceses se habían apoderado de la mayor parte de la ciudad el 7 de noviembre;[119] en la lucha murieron entre setecientos cincuenta y mil egipcios[115]. El presidente estadounidense Dwight D. Eisenhower condenó la invasión y abogó por solucionar el conflicto mediante el repliegue de los coligados y el envío de una Fuerza de urgencia de las Naciones Unidas al Sinaí[120]. Nasser eligió a Eisenhower y declaró que había desempeñado el « el rol el plus decisivo » en el desbaratamiento de la « conspiración tripartita[80] ». Las fuerzas británicas y francesas se replegaron completamente del territorio egipcio a finales del mes de diciembre,[120] mientras que Israel hizo lo propio en marzo de 1957 después de haber liberado a todos los prisioneros de guerra[115],. Como consecuencia de la crisis del canal de Suez, Nasser impuso requisitos rigurosos obtener el derecho de residencia y de ciudadanía, que afectaron esencialmente a los judíos, tanto egipcios como extranjeros, y a los residentes franceses y británicos que tuvieron que abandonar el país por millares[123].[81]

El canal se reabrió el 8 de abril de 1957[124] y la posición política de Nasser mejoró considerablemente, ya que se consideró que había fracasado la invasión extranjera que pretendía derrocarlo. Según el historiador Nutting, la crisis « establece completamente y definitivamente Nasser » como rais (presidente) de Egipto[100].

Panarabismo y socialismo

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Photographie de cinq hommes debout cote à cote derrière une table. Quatre portent des costumes et le cinquième porte un costume traditionnel bédouin.
Firma del pacto de defen Catégorie:Article contenant un appel à traduction en anglais sa regional por (de izquierda a derecha): el primer ministro Sulayman al-Nabulsi de Jordania, el rey Husein de Jordania, el rey Saud de Arabia saudita, Nasser y el primer ministro Sabri al Assali de Siria.

En 1957, el panarabismo era la ideología dominante del mundo árabe y numerosos habitantes de la región consideraban a Nasser su representante indiscutible[125]. El historiador Adeed Dawisha atribuye el predicamento de Nasser a su « charisme reforzado por la percepción de su victoria durante la crisis del canal de Suez[82] ». La estación de radio Voz de los Árabes, que emitía desde El Cairo, propagaba las ideas de Nasser de una unión de los países arabófonos y el historiador Eugene Rogan escribió que « Nasser conquistó el mundo árabe por la radio[83] ». Disponía igualmente del apoyo de organizaciones nacionalistas árabes tanto civiles como paramilitaires en toda la región. Los partidarios del nasserismo eran numerosos y estaban bien financiados, pero carecían de organización y de una estructura permanente que los encuadrase[127].

En enero de 1957, el primer ministro jordano y partidario de Nasser[128], Sulayman al-Nabulsi, integró su país en una alianza militara la que pertenecían Egipto, Siria y la Arabia saudita[129]. Las relaciones entre Nasser y el rey Husein de Jordania se deterioraron en abril cuando este acusó a aquel de haber planeado dos golpes de Estado contra él[130],[131]. Nunca se probó la participación egipcia en las conspiraciones[132],[133] pero el Gobierno de al-Nabulsi fue destituido[130],[131]. En la Voz de los Árabes, el presidente egipcio acusó a Husein de ser un «secuaz de los imperialistas[84]». Por su parte, el rey saudí Saud se inquietaba por la popularidad creciente de Nasser en su país y de la amenaza que podría suponer para la familia real[130]. A pesar de la oposición creciente de los Gobiernos jordano, saudí, iraquí y libanés, el prestigio de Nasser permanecía intacto en Egipto y en los demás países árabes.

También en enero, los Estados Unidos adoptaron la doctrina Eisenhower que pretendía impedir la expansión del comunismo en Oriente Próximo proporcionando apoyo financiero y militar a los países de la región[135]. Aunque Nasser se oponía al comunismo en la región, los regímenes prooccidentales de la zona creían que su panarabismo resultaba una amenaza[135],[136]. Eisenhower intentó aislar a Nasser y reducir su influencia haciendo de Arabia saudí un contrapeso de Egipto[135],[136]. A finales de 1957, Nasser había nacionalizado los últimos intereses franceses y británicos en Egipto[137]. Cuando sus incentivos fiscales que pretendían atraer inversiones extranjeras no encontraron el éxito deseado, nacionalizó nuevas industrias para integrarlas en su modelo de desarrollo económico[137]. El control gubernamental no era total y dos tercio de la economía quedaron en manos del sector privado[137]. Las acciones de Nasser permitieron un aumento de la producción agrícola y la aceleración de la industrialización[137]. Decidió igualmente conceder la construcción de la presa de Asuán a la Unión soviética después de la retirada de las ofertas occidentales[137].

República árabe unida

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Photographie montrant la signature de documents par deux hommes assis. Un grand nombre d'hommes en costume observent la scène.
Firma del pacto que creó la República árabe unida por Nasser y el presidente sirio Shukri al-Kuwatli.

A pesar de la popularidad de Nasser entre los pueblos árabes, el único aliado regional de Egipto en 1957 era Siria[138]. En septiembre, el ejército turco se desplegó a lo largo de la frontera siria y surgieron rumores de que los países del pacto de Bagdad iban a derrocar al Gobierno socialista sirio[138]. Nasser envió tropas en el país para demostrar simbólicamente su solidaridad con este y ello incrementó todavía más su prestigio en el mundo árabe y en particular en Siria[138].

Como la situación política empeoraba en Siria, una delegación acudió a solicitar a Nasser la unión inmediata con Egipto[139]. Este al principio rechazó la proposición, indicando la incompatibilidad de los sistemas políticos y económicos de los dos países, la ausencia de frontera común, el intervencionismo pasivo del ejército sirio en los asuntos políticos y las hondas divisiones políticas sirias[139]. En enero de 1958, una segunda delegación logró convencer a Nasser de la inminencia de un golpe de Estado comunista y de la posibilidad de que se desencadenase una guerra civil[140]. Nasser aceptó entonces la unión siempre y cuando fuese completa en el ámbito político y él quedase al frente del nuevo país, condiciones que los delegados y el presidente sirio Shukri al-Kuwatli aceptaron[141]. El 1 de febrero de 1958, se proclamó la creación de la república árabe unida (RAU); según el historiador Dawisha, la reacción del mundo árabe fue de «estupefacción, que se transformó rápidamente en una euforia incontrolable[85] ». Nasser ordenó la represión de los comunistas sirios y mucho fueron destituidos de sus funciones oficiales[143],[144].

Trois hommes sont assis dans un canapé. Deux sont en costume et le troisième porte une tenue traditionnelle bédouine.
Nasser con el príncipe Muhammad al-Badr de Yemen del Norte y Shukri al-Kuwatli en febrero 1958, reunidos con ocasión de la creación de los Estados árabes unidos.

El 24 de febrero, Nasser realizó una visita sorpresa a Damasco para celebrar la unión y fue recibido por centenares de miles de personas[145]. El príncipe Muhammad al-Badr de Yemen de Norte acudió a Damasco para proponer la integración de su país a la unión. Nasser aceptó la idea de establecer una unión federal llamada Estados árabees unidos con Yemen en lugar de una integración total[146]. Mientras Nasser se hallaba en Siria, el rey Saud sopesó asesinarlo durante el vuelo de regreso a Egipto[147]. El 4 de marzo, Nasser se dirigió a la multitud damascena y mostró un documen Catégorie:Article contenant un appel à traduction en anglais to saudí en el que se pedía a Abdel Hamid al-Sarraj, el jefe de la seguridad siria y uno de sus partidarios, que derribase el avión de Nasser[148]. Como consecuencia del escándalo, la familia real saudí obligó a Saud a ceder gran parte de sus poderes a su hermano Faisal[149].

Un día después de haber anunciado la tentativa de atentado, Nasser redactó una nueva Constitución provisional que preveía la formación una asamblea nacional de seiscientos miembros (cuatrocientos de Egipto y doscientos de Siria) y la disolución de todos los partidos políticos incluido el partido Baas[149]. Nombró dos vicepresidentes para cada uno de los dos territorios: Abdel Latif Boghdadi y Abdel Hakim Amer para Egipto y Sabri al-Asali y Akram Hourani para Siria[149]. Nasser viajó luego a Moscú para reunirse con Nikita Jruschov. Durante la reunión, el mandatario soviético pidió que se dejase de reprimir al partido comunista, pero Nasser lo rechazó, indicando que se trataba de un asunto interno. Como los dos mandatarios no deseaban una ruptura entre sus dos países, la cuestión se arrumbó[150].

Influencia en el mundo árabe

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En el Líbano, los enfrentamientos entre los partidarios de Nasser y los de uno de sus principales opositores, el presidente Camille Chamoun, culminaron en la crisis de mayo 1958[152]. Los primeros deseaban que el país ingresase en la RAU, mientras que los segundos querían mantener la independencia del Líbano[152]. Por medio de Sarraj, Nasser proporcionó apoyo financiero y material a sus partidarios libaneses[153] pero en mucha menor escala de lo denunció Chamoun[154],[155]. Nasser no buscaba a controlar el Líbano, sino simplemente impedir que Chamoun obtuviese un segundo mandato[155].

Photographie de deux hommes en costume debout cote à cote. Plusieurs hommes en uniforme militaire et costumes se tiennent derrière eux et certains saluent.
Nasser (a derecha) y el presidente libanés Fuad Chehab en la frontera entre Siria y Líbano durante las conversaciones sobre la crisis de mayo de 1958. Akram Hourani es el tercero a la izquierda de Nasser y Abdel Hamid al-Sarraj se encuentra a la derecha de Chéhab. Marzo de 1959.

El 14 de julio, los oficiales Abdul Karim Qasim y Abdel Salam Aref del Ejército iraquí derrocaron al monarca del país y, al día siguiente, murió asesinado el primer ministro, uno de los principales opositores de Nasser, Nouri Saïd[156]. Nasser reconoció al nuevo Gobierno y declaró que «todo ataque contra Irak equivalía a un ataque contra la RAU[86]». El 15 de julio, los infantes de marina estadunidenses desembarcaron en el Líbano y fuerzas especiales británicas se desplegaron en Jordania a instancias de sus Gobiernos respectivos para impedir la toma del poder por fuerzas favorables a Nasser. Este creía que la revolución iraquí allanaba el camino a la unificación de las naciones árabes[157]. El 19 de julio, Nasser declaró por primera vez que sopesaba la creación de una unión árabe, aunque no tenía planes para integrar Irak en la RAU[151]. Aunque la mayoría de las miembros del consejo revolucionario iraquí (en) deseaban una unión con la RAU[158], Qasim trataba de garantizar la indepen Catégorie:Article contenant un appel à traduction en anglais dencia iraquí y se preocupaba por la popularidad de Nasser en el país[152].

En otoño de 1958, Nasser formó un comité tripartito compuesto por Zakaria Mohieddin, Akram Hourani y Salah Bitar para supervisar los acontecimientos en Siria[159]. Al traer a estos dos últimos, miembros del partido Baas, a El Cairo, neutralizó a estas destacadas figuras políticas, que tenían sus propias ideas sobre la manera de gestionar Siria[159]. Dejó el dominio de esta a Sarraj, que impuso un Estado policial que apresó y exilió a los terratenientes que se oponían a la reforma agraria[159]. Como consecuencia de la elección del presidente libanés Fuad Chehab en septiembre 1958, las relaciones entre Líbano y la RAU mejoraron considerablemente[160]. El 29 de marzo de 1959, Chehab y Nasser se reunieron en la frontera sio-libanesa para poner final a la crisis libanesa[160].

Photographie du dos d'un homme saluant une foule depuis le sommet d'un bâtiment
Nasser saluda la multitud en Damasco en octubre de 1960.

En marzo de 1959, las fuerzas de Kasim desbarataron un alzamiento organizado en Mosul por partidarios de Nasser[161]. El presidente egipcio consideró de enviar tropas para sostener la insurrección antes de renunciar[162]. Nasser prosiguió la represión de los comunistas egipcios debido al apoyo llave que los comunistas iraquíes proporcionaban a Kasim. Varios miembros influyentes del partido comunista fueron arrestados, entre ellos el antiguo aliado de Nasser, Jaled Mohieddin, al que se había autorizado a volver en Egipto en 1956[163]. En diciembre, la situación política en Siria se estaba deteriorando y Nasser reaccionó nombrando a Amer gobernador-general junto a Sarraj. Los mandatarios sirios se opusieron a esta medida y muchos dimitieron. Nasser se reunió más tarde con los jefes de la oposición y durante un tenso intercambio declaró que era el presidente «elegido» de la RAU y que los que no aceptasen su autoridad podían «irse[159]».

Derrumbamiento de la RAU

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La oposición a la república árabe unida se incrementó en Siria[164] en particular entre las elites económicas, políticas y militares[165]. Como respuesta al deterioro de la economía siria, que Nasser atribuía a que estaba dominada por la burguesía, decidió en julio nacionalizar grandes sectores económicos[166]. También destituyó a Sarraj en septiembre, para frenar la crisis política creciente. El historiador Aburish indica que Nasser no era totalmente capaz de gestionar los problemas sirios porque «[87]le eran ajenos». En Egipto, la situación económica era más estable: el PIB crecía un 4,5 % y se estaba produciendo un rápida expansión de la industria[167]. En 1960, Nasser nacionalizó la prensa, que ya favorecía a su gobierno, para orientar la atención del público hacia las cuestiones socioeconómicas del país y aumentar el apoyo del pueblo a sus reformas socialistas[76].

El 28 de septiembre de 1961, unidades del Ejército partidarias de la secesión organizaron un golpe de Estado en Damasco y proclamaron la independencia de Siria[168]. Como consecuencia, unidades favorables a la unión destinadas en el norte de Siria se amotinaron y se produjeron protestas en favor de Nasser en las principales ciudades sirias[165]. AL principio, este desplegó las fuerzas especiales en Latakia para reforzar a sus partidarios, pero las retiró dos días más tarde, alegando su rechazo a autorizar combates entre árabes[169]. Al comentar la disolución de la RAU el 5 de octubre[170], Nasser afirmó que asumía personalmente la responsabilidad del hecho[169] y declaró que Egipto reconocería al Gobierno sirio si era elegido[170]. En privado, acusó de intromisión a los Gobiernos árabes hostiles[169]. Según Heikal, Nasser tuvo una crisis nerviosa y su salud comenzó a empeorar después de la disolución de la unión[169]. También comenzó a fumar cada vez más[169].

En octubre de 1961, Nasser emprendió un gran programa de nacionalización, ya que sostenía que la adopción total del socialismo era la solución a los problemas del país y que habría permitido incluso evitar la secesión de Siria. La Unión nacional recibió un nuevo nombre: el de Unión socialista árabe;[171] las medidas adoptadas permitieron al gobierno egipcio controlar el 51 % de la economía del país en 1962[172]. A estas medidas económicas se unió una mayor represión, que se reflejó en el encarcelamiento de millares de islamistas, de los cuales decenas eran oficiales del Ejército[173].

Renovación regional

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Photographie de trois hommes souriants portant un costume et en train de marcher cote à cote.
Nasser (en el centro) recibe el presidente argelino Ahmed Ben Bella (a derecha) y al presidente iraquí Abdel Salam Aref (a izquierda), que acuden a la cumbre de la Liga árabe que se celebró en Alejandría en septiembre de 1964.

La posición de Nasser en la región cambió repentinamente cuando de oficiales yemeníes acaudillados por Abdullah al-Sallal, partidario de quel, derrocaron al rey Muhammad al-Badr de Yemen del Norte el 27 de septiembre de 1962[174]. Al-Badr y sus partidarios comenzaron a recibir ayuda de Arabia saudí para restaurar la monarquía, mientras que Abdullah al-Sallal aceptó la de Nasser para consolidar su nuevo gobierno[175]. Egipto quedó así envuelto en una guerra subsidiaria contra Arabia saudita al participar en la guerra civil yéménite, hasta que retiró sus fuerzas del país en 1967[175]. La mayoría de los antiguos compañeros de Nasser dudaban de lo oportuno de participar en la guerra yemení, pero Amer aseguró al presidente egipcio que la victoria se lograría pronto[176]. Nasser indicó en 1968 que la intervención en Yemen había sido un « error de juicio[88]».

El 8 de febrero de 1963, el partido Baaz iraquí dio un golpe de Estado y los partidarios de Nasser derrocaron a Kasim, que fue ejecutado luego. Asumió la presidencia el nasserista Abdel Salam Aref[177]. Un golpe de Estado similar derrocó al Gobierno sirio el 8 de marzo[178]. Las nuevas autoridades siria e iraquí enviaron delegaciones a Egipto para abogar por el establecimiento de una nueva unión árabe el 14 de marzo[179]. Durante una reunión, Nasser criticó con dureza a los baasistas que « facilitaron la sécession de Siria de la RAU[89] » y afirmó que era el « jefe de los Árabes[90] ». Se firmó el 17 de abril un acuerdo provisional que preveía la creación de un Estado federal[179]  y que debía entrar en vigor en mayo de 1965[181]. La unión quedó anulada sin embargo a causa de las purgas en el Ejército sirio de partidarios de Nasser. El coronel nasserista Jassem Alwan organizó un golpe de Estado para intentar retomar el control del país, pero fracasó y Nasser calificó a los baasistas de « fascistas[182] ».

Photographie de plusieurs hommes de profil observant une large foule.
Nasser y el presidente yemení Abdullah al-Sallal (que saluda) en Saná en abril de 1964.

En enero 1964, Nasser organizó una reunión de la Liga árabe en El Cairo para redactar una respuesta común a los planes israelíes para desviar el curso del Jordán, lo que Siria y Jordania consideraban un acto de guerra[183]. Nasser atribuyó a las las divisiones entre árabes de lo que calificó de « situación desastrosa[184] ». Criticó las acciones de las guerrillas sirias y palestinas contra Israel, indicando que no estaba listo para entrar en guerra contra este[184]. Durante la cumbre, Nasser estableció relaciones cordiales con el rey Husein y se restablecieron los vínculos con los dirigentes de Arabia saudita, de Siria y de Marruecos[183]. En mayo, Nasser aceptó formalmente compartir la autoridad sobre la cuestión palestina[184] al fundar la Organización para la Liberación de Palestina (OLP)[184],[185]. En la práctica, Nasser utilizó a la OLP para controlar las unidades paramilitaires palestinas[185] y su primer presidente, Ahmed Shukeiri, fue el candidato personal de Nasser[184].

Después de años de coordinar su política exterior, Nasser, el presidente yugoslavo Tito y el presidente indio Nehru fundaron el movimiento de los no-alineados en 1961[186]. Su objetivo declarado era asegurar la neutralidad del Tercer Mundo, reforzar la cooperación entre los países en vías de desarrollo y cooperar en el final de la colonización[187]. En 1964, Nasser fue elegido presidente de la organización y la segunda conferencia del movimiento se organizó en El Cairo[188]. Ese mismo año recibió la distinción de héroe de la Unión soviética[189].

Nasser fue una de las figuras llaves del refuerzo de la solidaridad africana a finales de la década de 1950 y  principios de la siguiente, aunque la influencia en el continente pasó progresivamente a Argelia a partir de 1962[190]. Durante este periodo, Nasser hizo de Egipto un refugio para los jefes de los movimientos independentistas africanos y autorizó la difusión de propaganda anticolonial desde El Cairo[190]. A partir de 1958, desempeño  un papel decisivo en las discusiones que llevaron a la creación de la Organización de la unidad africana en 1963[190].

Modernización y tensiones internas

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Photographie d'un groupe d'hommes en chaussettes marchant cote à cote sur un tapis.
Rezo del Viernes en la mezquita Al-Azhar en enero de 1966. De izquierda a derecha: el presiden Catégorie:Article contenant un appel à traduction en anglais te de la asamblea nacional Anuar el-Sadat, el gran imán Hassan Mamun, Nasser, el vicepresidente Hussein el-Shafei y el ministro del Interior, Zakaria Mohieddin.

En 1961, Nasser trató de establecer firmemente el dominio de Egipto en el mundo árabe y de promover una segunda revolución para fusionar las ideologías socialistas e islámicas y satisfacer los deseos de la población[191]. Con este fin, acometió varias reformas para modernizar la universidad al-Azhar, que era en la práctica la autoridad principal del islam suní, y reforzar su dominio sobre los Hermanos musulmanes y el wahabismo más riguroso defendido por Arabia saudí[191]. Nasser había utilizado a los ulemas (universitarios) más favorables como contrapeso de la influencia de los Hermanos Musulmanes desde 1953[58]. Nasser obligó a la universidad a modificar sus programa educativo, que servía de modelo al resto del sistema educativo egipcio; esto permitió la apertura de escuelas mixtas y la introducción de la enseñanza de la evolución en el currículo. Se aprobaron también reformas para fusionar los tribunales religiosos y civiles[191]. Obligó también a la universidad a emitir una fetua para mejorar la integración de los chiitas, alauitas y drusos en el seno de la sociedad; a estos grupos durante varios siglos se les había considerado herejes.[191].

Como consecuencia de la secesión siria, Nasser se preocupó cada vez más por la incapacidad de Amer de modernizar el Ejército, que había creado un verdadero Estado en el Estado, con sus propios servicios de información[192],[193]. A finales de 1961, Nasser creó un consejo presidencial y le otorgó autoridad para filtrar los nombramientos al Estado Mayor, potestad que hasta entonces había tenido Amer[194],[195]. Exigió igualmente que el principal criterio para los ascensos fuese el mérito y no las relaciones personales del candidato[194]. Sin embargo, tuvo que abandonar estas reformas cuando los oficiales simpatizantes de Amer amenazasen con amotinarse[195]. A comienzos de 1962, intentó nuevamente retomar el control del aparato militar[195]. Amer reaccionó enfrentándose directamente a Nasser por primera vez y reuniendo secretamente a los oficiales que le eran leales[194],[196]. Nuevamente, Nasser cedió para evitar un posible conflicto entre las autoridades civiles y militares[197]. Según Boghdadi, la tensión suscitada por el desmembramiento de la RAU y la autonomía creciente de Amer impelió a Nasser, que sufría ya de diabestes, a comenzar a tomar analgésicos, consumo que mantuvo hasta el final de su vida[198].

Photographie de deux hommes sur une estrade avec un drapeau derrière eux. Le premier lit un papier tandis que le second regarde l'audience. Une caméra est visible à l'arrière-plan.
Nasser presta juramento en la toma de posesión de su segundo mandato como presidente, el 25 de marzo de 1965.

Para organizar y reforzar las simpatías populares y limitar la influencia del Ejército, Nasser promulgó una nueva Constitución en 1963[199]. Presentó igualmente reformas para crear un sistema de seguro por enfermedad, de viviendas sociales y de formación profesional, para ampliar el canal de Suez, reforzar los derechos de las mujeres y poner en marcha una planificación familiar[192]. Trató también de mantener el control sobre la función pública del país, para evitar que creciese en demasía y resultase una carga para la economía[192]. Nuevas leyes instauraron el salario mínimo, la gratuidad de la educación y una reducción del tiempo de trabajo. Se emprendieron reformas agrarias para incrementar la producción agrícola y reducir la pobreza rural[200]. El 15 de marzo de 1965, Nasser fue reelegido presidente con el 100 % de los votos y el mismo año, se apresó al principal idéologo de los Hermanos Musulmanes, Said Qotb[201]. Este fue condenado por haber planeado el asesinato de Nasser y ajusticiado en 1966[201]. A partir de 1966, como la economía egipcia comenzaba a mostrar signos de debilidad y la deuda resultaba carga cada vez mayor, Nasser decidió reducir el control estatal del sector privado, facilitar los préstamos bancarios y fomentar las exportaciones[202]. Ese mismo año, sufrió un infarto[203].

Guerra de los Seis Días

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Trois hommes dont deux en uniformes militaire marchent dans un couloir.
Nasser (en el centro), el rey Husein de Jordania (a la izquierda) y Amer (a la derecha) en el cuartel general egipcio, antes de la firma del pacto de ayuda mutua del 30 de mayo de 1967.

A principios de 1967, la Unión soviética advirtió a Nasser de la inminencia de un ataque israelí a Siria[204],[205]. Amer utilizó este aviso como pretexto para desplegar el 14 de mayo tropas en el Sinaí y exigir la retirada de las fuerzas de la Organización de Naciones Unidas, sin pedir para ello la autorización de Nasser[205],[206]. El mismo día, Nasser recibió un mensaje del rey Husein de Jordania, cuyas fuentes en Washington le habían informado de que los Estados Unidos e Israel conspiraban para provocar a Egipto a entrar en un conflicto[207]. Amer había recibido el mensaje el 2 de mayo, pero a Nasser no se lo comunicaron hasta el 14 de mayo, después del despliegue de las fuerzas en el Sinaí[207],[208]. Aunque las relaciones entre Nasser y Husein eran tirantes[209], este temía que una guerra condujese a la ocupación israelí de Cisjordania[207]. El 15 de mayo, Nasser intentó reducir las tensiones pidiendo a la ONU que limitase la retirada de sus fuerzas al norte del Sinaí, pero esta rechazó la solicitud[207]. A pesar de las advertencias, Nasser continuaba creyendo que los Estados Unidos impedirían actuar a Israel[210]. Por su parte, aseguró tanto a los Estados Unidos y como a la Unión soviética que Egipto se limitaría a defenderse y no atacaría a Israel[210].

El 5 de marzo, las fuerzas de seguridad de Nasser arrestaron a millares de participantes del alzamiento de 1952[66]. Con el fin de recuperar la unidad de la oposición tal como existía antes de la toma del poder, el RCC decretó el final de las restricciones sobre los partidos implantada durante del periodo monarquíco y la retirada de los oficiales libres de la política[66]. Los que se habían beneficiado de la revolución impulsada por estos (obreros, campesinos y los artesanos) se opusieron a este decreto[68] ; un millón de trabajadores se pusieron en huelga y millares de campesinos marcharon a El Cairo para protestar a finales del mes de marzo[69]. Naguib sopesó la posibilidad de reprimir las manifestaciones, pero las fuerzas de seguridad se negaron a hacerlo[70]. El 29 de marzo, Nasser anunció la anulación de los decretos en respuesta a las exigencias de la calle[70]. Entre abril y junio, se arrestó o destituyó  a centenares de partidarios de Naguib en el ejército y Mohieddin tuvo que partir al exilio en Suiza[70].

Photographie en plongée d'une large foule portant un portrait de Nasser
Manifestantes egipcios protestan contra la dimisión de Nasser en 1967.

Últimos años

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Nasser mantuvo contactos secretos con Israel en 1954-1955 pero juzgó una paz imposible con un país que consideraba como «un Estado expansionista que desdeña a los árabes[71]». El 28 de febrero de 1955, las tropas israelíes atacaron la franja de Gaza, controlada por Egipto, para poner final a los ataques de los fedayines palestinos. Nasser estimaba que el ejército egipcio no estaba listo para sostener un conflicto con Israel, pero la incapacidad para responder a las acciones israelíes dañó su popularidad[79],[80]. Ordenó entonces el refuerzo del bloqueo del estrecho de Tiran y en septiembre limitó el tráfico aéreo israelí en el golfo de Aqaba[79]. En respuesta, los Israelíes se desplegaron en la zona désmilitarizada de al-Auja, en la frontera egipcia el 21 de septiembre[80].

Muerte y funeral

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Photographie de l'avant d'une mosquée avec une horloge dans son unique minaret
La mezquita Abdel Nasser de El Cairo donde descansa el cuerpo de Nasser.

Herencia

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El 26 de julio de 1956, Nasser dio un discurso en Alejandría durante el cual anunció la nacionalización de la compañía del canal de Suez con el fin de financiar la construcción de la presa de Asuán tras la retirada anglo-estadounidense del proyecto[99]. En el discurso, denunció el imperialismo británico en Egipto y su control de los beneficios obtenidos de la explotación del canal. Declaró que el pueblo egipcio tenía el derecho de ejercer su soberanía sobre el canal ya que millares de egipcios habían muerto construyéndolo[99]. La decisión era técnicamente una infracción del acuerdo firmado con el Reino Unido el 19 de octubre de 1954,[100] incluso si, como afirmó, se compensaría a los accionistas.[75]

Imagen

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Un homme à genoux regarde un homme assis qui lui tient la main. Plusieurs hommes en uniforme militaires se tiennent à l'arrière-plan.
Nasser ofrece trabajo a una persona sin hogar al que se había encontrado dormido bajo la tribuna presidencial, 1959.

Notas y referencias

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Notas

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Referencias

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ntuvo

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